La región nórdica ostenta la brecha de género más pequeña del mundo, pero en los bancos, esa brecha se ensancha. La diferencia  más pequeña entre los empleados de banco nórdicos se da en Dinamarca, donde las mujeres en promedio ganan un 22% menos, y la más grande en Finlandia, con una diferencia del 35%.

Las mujeres que trabajan en los sectores bancarios y de seguros en Suecia, Noruega, Dinamarca, Finlandia e Islandia ganan alrededor de un tercio menos que sus pares hombres. En ninguna otra industria la discrepancia alcanza esas dimensiones, de acuerdo con los datos de la Comisión Europea.

“Es una batalla cuesta arriba”, declaró en entrevista Laila Busted, que dirigió el departamento de igualdad de género de la Confederación Danesa de Sindicatos durante ocho años hasta abril. “Hasta las mujeres piensan: ‘¿Discriminación? Acá en Dinamarca, no. Tenemos igualdadde oportunidades’”.

Las cifras indican que los bancos se están convirtiendo en uno de los últimos bastiones del tipo de discriminación sexual que desapareció hace largo tiempo en otros campos.

Pese a que los datos del Foro Económico Mundial muestran que una cultura que apunta a la igualdad en la educación, la salud y la política en la región nórdica ha dado como resultado una de las brechas de género más pequeñas del mundo, las finanzas hasta ahora permanecen inmunes a esos avances.

Según Pia Andreasen, vicepresidenta sénior de recursos humanos de Danske Bank A/S de Copenhague, los datos sobre remuneraciones reflejan distintos niveles de conocimientos más que el género.

¿CONCLUSIÓN IMPARCIAL?

Deben tomarse en cuenta “factores remunerables como nivel del cargo, años de experiencia, ubicación geográfica, nivel de educación”, dijo Andreasen en una entrevista. “Por eso, no es tan fácil hacer este tipo de comparación y sacar una conclusión imparcial”.

Karen Froesig, máxima responsable ejecutiva de 56 años de Sydbank A/S, la tercera institución de préstamo de Dinamarca que cotiza en bolsa, señaló que se acostumbró a estar en minoría respecto de los hombres desde un principio, después de estudiar física, matemática y luego derecho en una época en que muy pocas mujeres optaban por esas carreras.

“Las mujeres tradicionalmente buscan trabajos que no apuntan a llegar a la cima, mientras que los hombres buscan la remuneración más alta y el mayor prestigio”, dijo Froesig en una entrevista.

Froesig ganó unos 888 mil dólares el año pasado, según el informe anual 2013 de Sydbank. Esto se compara con los 2.7 millones que recibió Christian Clausen, máximo responsable ejecutivo de Nordea Bank AB, la mayor entidad de préstamo de la región nórdica. Jamie Dimon, CEO de JPMorgan Chase Co. ganó aproximadamente 20 millones de dólares en 2013.

La diferencia de salario más pequeña entre los empleados de banco nórdicos se da en Dinamarca, donde las mujeres en promedio ganan un 22 por ciento menos que sus colegas hombres, y la más grande se registra en Finlandia, donde la diferencia es del 35 por ciento, muestran las cifras no ajustadas del organismo de estadísticas de la Comisión Europea.

Fuente: El Financiero