Por José Gregorio Aguilar
Según el reporte actualizado de la Asociación Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) las fiestas decembrinas en este 2023 cuestan un 50 por ciento más que las del año pasado.
Cuauhtémoc Rivera afirmó que las piñatas, comida, veladoras, luces, bebidas, botana y las decoraciones, es decir todo lo que se requiere para una posada, tuvieron un incremento conforme se aproximaban las fechas.
De manera que los insumos, tanto para las cenas como para las posadas, registran un incremento de hasta el 60 por ciento, comparativamente al 2022.
Dijo que la Navidad y el Año Nuevo son fechas que los mexicanos más esperan y más festejan de manera que las familias mexicanas invierten grandes cantidades de dinero en cenas, posadas y celebraciones por el fin de año aunque para eso tengan que endeudarse o pedir prestado.
De acuerdo con los resultados de un estudio de mercado respecto a la variación de precios que registran los alimentos tradicionales que se consumen en los festejos de fin de año, la ANPEC informó que estos muestran un aumento promedio de entre 50 y 60 por ciento, respecto al año anterior, por lo que las familias se verán en la necesidad de aplicar la tradicional estrategia de “cena de traje”, que consiste en que todos los integrantes puedan aportar con un platillo.
Tan sólo para una cena familiar en casa, que contemple de 11 a 15 personas, los precios generales subieron de 7 mil 800 a 11 mil 700 pesos este año.
El año pasado, un ticket promedio en restaurante era de 800 pesos, pero para 2023 ese costo subirá a los 1 mil 100 pesos, en cambio, si se cena en un restaurante de especialidad, el precio subirá a los 1 mil 500 pesos y hasta los 1 mil 800 en el caso de las cocinas gourmet.
Los insumos que más subieron, subrayó Cuauhtémoc Rivera, fueron para la comida, que pasó de 3 mil a 4 mil 800 pesos de inversión, al igual que las decoraciones, por las que se paga 800 pesos cuando un año antes se adquirieron por 500.
“Sin duda las fiestas decembrinas 2023 serán más caras que el diciembre pasado y eso plantea el reto de celebrar sin endeudarse, lo que no es un reto nada menor, pero hoy más que nunca, las familias deberán intentarlo” puntualizó.
Los productos más encarecidos en este caso fueron no sólo la comida, sino la piñata llena, las bebidas y la botana con un aumento de 50 por ciento respecto al año pasado, concluyó el dirigente de ANPEC.
